Hola, aquí estoy de nuevo, hoy que estoy de vacaciones quiero escribir más, ya que es bonito escribir, es un pasatiempo súper bueno, vengo con un tema que yo sé que nunca había escrito, pero estoy emocionada por el ciclo que viví estos seis meses anteriores, fue genial, no quería que acabara.
Nunca había escrito sobre las experiencias de mis clases, por que nunca había tenido un semestre donde se me diera la oportunidad de practicar, al mismo tiempo que aprender, este fue un ciclo súper emocionante, de verdad que me encantó, me sentí profesional y muy segura de mí misma, confiando en mis capacidades.
Pude superar mi temor de ir al Hospital Psiquiátrico y entrevistar a los pacientes, yo entrevisté a un paciente hombre, mi compañera de grupo a otro paciente hombre, y mi compañero de grupo a una paciente mujer, todos completamente diferentes, pero muy interesantes los tres casos.
Los niños... los niños son mi adoración, ya que son aquellos seres que cuando te aman, te dan todo su corazón, también hay que tener mucho cuidado porque son esponjitas e imitan todo lo que ven... me encanta la idea de trabajar con ellos, ser psicóloga clínica o educacional (niños y adolescentes).
Tenía dos materias donde practicaba y dos materias donde solamente era teoría, realmente no sé cómo hubiera sentido si todas las materias hubieran sido de práctica, pero esque todo estuvo lindo, las maestras desarrollaban los temas súper bien, le daban gusto a las clases.
De las maestras, pues tuve dos maestras titulares, a las que les pude entregar totalmente mi cariño, y siento que ellas también. Una maestra adjunta, un poco seria, a la que no pude entregarle totalmente mi cariño, y mi maestro que siempre lo he querido, ya que es el coordinador de la Escuela de Psicología.
Mi resultado final, gracias a Dios y a la Virgen María pasé en limpio, sí hubo una materia bastante dificil que era con la que fui al Hospital Psiquiátrico, lo dificil eran los informes, las defensas de cada caso, completamente de memoria, sin una guía, y al final que hicimos un examen del mismo caso defendido.
Me preocupé, porque me faltó poner en el examen lo principal, que era el resultado de mi trabajo, mi miedo era reprobar esa materia, a pesar de que había salido bien en los dos primeros períodos, pero mi maestro es sorpresivo, y tuve temor que solo por eso no me avalara el paso de la materia.
Nunca había escrito sobre las experiencias de mis clases, por que nunca había tenido un semestre donde se me diera la oportunidad de practicar, al mismo tiempo que aprender, este fue un ciclo súper emocionante, de verdad que me encantó, me sentí profesional y muy segura de mí misma, confiando en mis capacidades.
Pude superar mi temor de ir al Hospital Psiquiátrico y entrevistar a los pacientes, yo entrevisté a un paciente hombre, mi compañera de grupo a otro paciente hombre, y mi compañero de grupo a una paciente mujer, todos completamente diferentes, pero muy interesantes los tres casos.
Los niños... los niños son mi adoración, ya que son aquellos seres que cuando te aman, te dan todo su corazón, también hay que tener mucho cuidado porque son esponjitas e imitan todo lo que ven... me encanta la idea de trabajar con ellos, ser psicóloga clínica o educacional (niños y adolescentes).
Tenía dos materias donde practicaba y dos materias donde solamente era teoría, realmente no sé cómo hubiera sentido si todas las materias hubieran sido de práctica, pero esque todo estuvo lindo, las maestras desarrollaban los temas súper bien, le daban gusto a las clases.
De las maestras, pues tuve dos maestras titulares, a las que les pude entregar totalmente mi cariño, y siento que ellas también. Una maestra adjunta, un poco seria, a la que no pude entregarle totalmente mi cariño, y mi maestro que siempre lo he querido, ya que es el coordinador de la Escuela de Psicología.
Mi resultado final, gracias a Dios y a la Virgen María pasé en limpio, sí hubo una materia bastante dificil que era con la que fui al Hospital Psiquiátrico, lo dificil eran los informes, las defensas de cada caso, completamente de memoria, sin una guía, y al final que hicimos un examen del mismo caso defendido.
Me preocupé, porque me faltó poner en el examen lo principal, que era el resultado de mi trabajo, mi miedo era reprobar esa materia, a pesar de que había salido bien en los dos primeros períodos, pero mi maestro es sorpresivo, y tuve temor que solo por eso no me avalara el paso de la materia.